Cinco de las quince tiendas de Alcampo de La Rioja sufrirán recortes de plantilla o cierres

Alcampo ha puesto en marcha un plan de ajuste de personal en España, una decisión «difícil», pero al mismo tiempo «responsable y necesaria», según la compañía de distribución. Las principales medidas afectarán al cierre de tiendas, «no más de 25 supermercados con dificultades», y que si se aplica por completo supondría el despido de 710 empleados, el 3% de una plantilla que a nivel nacional alcanza los 23.300 trabajadores.

Este proceso, que la empresa ya ha puesto en conocimiento de los representantes sindicales, con quienes ahora empezará un periodo de negociación, obedece a la transformación del sector, a la necesidad de «recuperar los resultados y asegurar un crecimiento sostenible» y al intento de Alcampo de «adaptarse a los nuevos hábitos de compra, donde los consumidores prefieren establecimientos más pequeños, convenientes y adaptados a sus necesidades».

De hecho, la firma, que es filial del grupo francés Auchan, ha iniciado ya un proceso de reducción de la superficie de quince de sus hipermercados, aunque en principio el que tiene en el centro comercial Parque Rioja de Logroño quedaría al margen. Sin embargo, y según ha podido saber Diario LA RIOJA de portavoces oficiales de la compañía de distribución, sí hay tiendas en nuestra comunidad que podrían verse afectadas dentro de las 152 que a nivel nacional están en riesgo de sufrir su desaparición –en el caso de no más de 25 según el comunicado oficial– o ajustes de plantilla en forma de despidos.

Así, los supermercados que hay en Logroño en las calles Chile 9, Pérez Galdós 13, Valcuerna 1-3-5 y Duques de Nájera 49-53 así como el que hay a la entrada de Haro una vez que se abandona la autopista –en la carretera LR-111 hacia Casalarreina– están en esa situación de, por el momento, «incertidumbre».

En el 70% de las tiendas que pueden perder empleados, el recorte tendría consecuencias para «entre uno y tres trabajadores», según la compañía. Aunque la interpretación de los sindicatos es que el plan supone «un nuevo golpe a la plantilla, enmarcado en un supuesto camino de transformación» y que «vuelve a poner sobre los hombros de los trabajadores el peso de decisiones empresariales que no tienen en cuenta el enorme esfuerzo, compromiso y profesionalidad» del personal.

Con el propósito de aumentar la cercanía con sus clientes, en 2023 Alcampo adquirió un paquete de 224 supermercados, «a pesar de que algunos de ellos no se adaptaban a su modelo. Pero su localización no era la deseable o tenían un tasa de esfuerzo excesiva», según la compañía.

Los sindicatos reclaman a la dirección de la empresa «transparencia total en la información» que se ha facilitado a los representantes de la plantilla y «una justificación detallada de las causas que motivan la reestructuración». Asimismo, exigen «alternativas al despido» con reubicaciones, movilidad voluntaria o reducción temporal de jornada y también «prejubilaciones incentivadas» para reducir el personal.

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